Momentos de intranquilidad, pánico y zozobra por inundaciones, encharcamientos y deslizamientos en diferentes puntos de la Sierra Nevada viven varias veredas del municipio Ciénaga entre ellos el corregimiento de Palmor.
De acuerdo a los habitantes de un Rinconcito en el Cielo y Capital Cafetera del municipio de Ciénaga, el corregimiento de Palmor ha sido el más golpeado con el inicio de la temporada de lluvias, porque una avalancha tapo el dinamo generador de energía de la hidroeléctrica ubicada en ese lugar y la boca toma del acueducto, dejando esta comunidad sin el servicio de energía eléctrica y agua potable.
La fuerte lluvias caídas han provocado varias avalancha que mantienen en alerta roja a las veredas de la parte baja del corregimiento de Palmor, y municipio ribereños del rio Sevilla.
Este pequeño y hermoso corregimiento de Ciénaga se encuentra incomunicado con las veredas Vergel, Uranio, San José, la Bodega Betel y California al igual que con la cabecera municipal de Ciénaga ya que ni a lomo de mula pueden bajar debido al mal estado de las vías de acceso y muchos habitantes han tenido que retroceder a la década de los años ochenta cuando en hamacas y a hombro tenían que bajar a sus enfermos hasta los centros asistenciales de la ciudad más cercana.
Los habitantes de estas comunidades hacen un llamado al director Nacional de la Gestión del Riesgo, a la Gobernación del Magdalena en cabeza de Carlos Caicedo Omar, al alcalde municipal de Ciénaga para las ayudas necesarias y para la reparación de las vías de acceso a sus comunidades que hoy los mantienen incomunicados con la capital del Magdalena.