Un juez federal decidió este viernes mantener la vigencia de la medida sanitaria que Estados Unidos impuso al inicio de la pandemia, que permite la expulsión inmediata de los migrantes que buscan asilo en sus fronteras.
El Título 42, como se denomina la medida que tiene sus orígenes en una ley del siglo XIX y que raramente fue utilizada, concede a las autoridades estadounidenses la potestad de expulsar de forma inmediata y sin proceso legal a los migrantes sin visa que se presenten en su frontera terrestre, incluso aquellos que soliciten asilo.
La administración de Joe Biden anunció en abril que la medida expiraría el 23 de mayo, pero a pedido de 24 estados controlados por el Partido Republicano, el juez federal de Louisiana, Robert Summerhays, emitió una orden judicial temporal para bloquear esta acción, dejando la medida en pie.
Para activistas y expertos, la implementación del Título 42 vulnera el derecho internacional al no acoger a quienes buscan asilo o huyen de condiciones violentas.
«La desafortunada decisión de hoy dice que el gobierno puede suspender el asilo sin aviso previo, pero no puede restaurar las leyes de migración normales sin atravesar un largo y complicado proceso», dijo a AFP Aaron Reichlin-Melnick, asesor político principal del Concejo Estadounidense para Migración, una organización sin fines de lucro.