Las inversiones que se realicen en agua en el departamento de La Guajira requieren de manera urgente su sostenibilidad para evitar que terminen como obras que no están prestando el servicio a la comunidad.
Una vez más, porque los medios locales ya lo habían denunciado, medios nacionales como Caracol TV referencian que los sistemas de agua que construyó el Departamento de Prosperidad Social y que entregó funcionando a la comunidad y a las administraciones locales de Uribia y Manaure, hoy están fuera de servicio por falta de mantenimiento.
Los sistemas que se construyen, necesariamente se les debe garantizar su sostenibilidad y esa responsabilidad inicial debe recaer en los entes territoriales y luego en las propias comunidades que deben cuidarlas para que no sean desmanteladas como ha ocurrido en más de un proyecto.
Y precisamente, es allí donde debe quedar claro quién responde después que se entreguen los sistemas que se construyan para garantizar su funcionamiento y servicio a la comunidad.
Los alcaldes deben asumir su responsabilidad porque son las administraciones las que responden por la prestación de los servicios públicos y las comunidades deben ser más exigentes y no dejar pasar que por falta de mantenimiento las obras se conviertan en ‘elefantes blancos’.
Un buen referente de un intento de sostenimiento deben ser las pilas públicas, del programa Guajira Azul, pues la estrategia no solo es la obra física como tal, sino en alianza con la comunidad definir su sostenibilidad y mantenimiento. Esa estrategia debe mejorarse para que cumpla el propósito.
Este es un ejemplo claro de cómo se puede garantizar el servicio, pero necesariamente, requiere que los alcaldes no se muestren indiferentes, porque estos proyectos por el momento es lo que puede garantizar el acceso a agua potable a cientos de comunidades dispersas en un extenso territorio.
Creer que con la represa del río Ranchería se llevará agua por tubería hasta la Alta Guajira no deja de ser un sueño por estos años, es posible que pueda lograrse, pero se requiere de altas sumas de recursos económicos y la seguridad para que la tubería no sea perforada en su recorrido.