La Fiscalía de Barcelona pide ocho años y dos meses de cárcel para Shakira por delitos contra la Hacienda Pública, que le reclama unos 14,5 millones de euros.
El ministerio público presentó este viernes, su acusación oficial ante el juzgado que instruye el caso, después de que la Audiencia de Barcelona avalara que debe ir a juicio.
El caso se remonta a 2017, cuando los denominados «papeles del paraíso», una investigación realizada por el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación, reveló que la cantante colombiana residía en Barcelona junto a su entonces marido, el futbolista del FC Barcelona, Gerard Piqué, y sus dos hijos, pero estaba supuestamente domiciliada en el paraíso fiscal de las Bahamas.
La investigación aseguraba además que la cantante gestionaba en dos países con ventajas fiscales, Malta y Luxemburgo.
Los abogados de la cantante aclararon que residía en las islas Bahamas desde 2004, pero los años siguientes tuvo que viajar «sin parar», y que, hasta 2015, su presencia en España no superó el plazo que la obliga a tributar y que la gestión de esos millones se realizaba desde 2007 a través de una sociedad maltesa que «cumple con todos los requisitos legales».
El pasado miércoles, la agencia de comunicación de la cantante anunció que Shakira había rechazado el acuerdo que le ofrecía la Fiscalía para evitar ser juzgada, dado que confía «plenamente» en su inocencia.
Su equipo legal mantuvo conversaciones con la Fiscalía de Barcelona para alcanzar un acuerdo que rebajara la pena que podría corresponderle, pero decidió rechazar la última oferta del ministerio público.