Anthony Loffredo es un francés de 32 que hace algún tiempo, mientras trabajaba como vigilante, se dio cuenta que no estaba viviendo cómo quería y por eso se trazó una nueva meta; transformar su cuerpo para convertirse en un alíen.
Desde entonces, Anthony se sometió a múltiples cirugías y hoy su aspecto ya se parece más al de los extraterrestres del cine que al de un ser humano. Su piel está completamente tatuada de negro, y se hizo varias cirugías para modificar su rostro y ponerse cuernos en la frente y también se cortó la punta de la lengua. Además recientemente viajó a España para cortarse parte de la nariz y el labio superior (no pudo hacerlo en Francia porque allí ese tipo de operaciones están prohibidas).
Anthony ha compartido en redes sociales su proceso de transformación, desde sus inicios a su estado actual. Este trabajo no ha sido fácil. Cuando se quitó el labio superior por ejemplo, tuvo que aprender a hablar de nuevo.
Sin embargo, este alíen terrestre asegura que su transformación apenas va en un 20% y su próximo gran paso es arrancarse la piel para reemplazarla con metal.