La cultura es patrimonio de valor inmaterial, digno de: respeto conservación y cuidado. Con ella revive historia y emprenden novedades. La cultura encierra tradiciones y costumbres vividas.
Nos alivia el anuncio del rescate del patrimonio histórico de la capital de La Guajira, por la administración del Distrito de Riohacha, en respuesta al clamor de selecto grupo de personas dolidos, por las indiferencias y el abandono, sobre notorios estados ruinosos de bienes inmuebles, del Centro Histórico, de la capital, desplomándose en pedazo por deterioro y peligro, sobre daños que puedan causar, publicando por redes sociales, en procura de mantener la conservación y reconstrucción, de por lo menos de 10 viviendas, que sobrepasaron el siglo. El hecho público, conmueve, al alcalde José Ramiro Bermúdez, quien reacciona de manera positiva, asumiendo el compromiso y responsabilidad, de materializarlo, dándole vía libre al proyecto, peticionado para adquisición y reconstrucción de los mismos, contratándolo a través de la oficina de Planeación municipal, en licitación pública.
Los citados inmuebles constituyeron elegancias coloniales y los primeros establecimientos de comercio de la ciudad, destacándose familias pioneras como: Abuchaibe, Fuentes, Danies, Genneco, Daez, Henríquez, Chassaine en otros. Los primeros años de 1900 las propiedades de distinguidas familias, fueron traspasadas de manera hereditarias y por enajenaciones, ubicadas en la llamada ‘Carrera del Comercio’ de Riohacha, (carrera sexta).
La administración distrital deberá suscribir un acuerdo para adquirirlo y conservar su estructura y diseño externo. En la calle tercera a la sexta, con la carrera de comercio, están tres bienes inmuebles que no dan esperas. La que fue propiedad del padre de Moris Daez, transferida, por herederos al señor Vladimiro Pérez, la del señor Emilio Vence, que tuvo la primera ferretería de la ciudad. La vivienda de la persona más rica de esa época ‘Pachito Fuente’ que fue transferida al señor Gaspar Lubo.
Desapareció donde funcionó la primera farmacia, hoy sede administrativa y operativa de Diario del Norte y Emisora Cardenal Estero y la esquina del negocio del abuelo de los Samper Pizano al lado de la Aduana antigua ‘Casona del Marisco’. También desapareció la esquina de propiedad de los Abuchaibe, donde funcionó el primer banco de Riohacha, Banco del Comercio y otros locales comerciales, convertido en parqueadero del centro. Esta propiedad fue adquirida por Miguel Agustín ‘Lucky’ Cotes Bernier.
De la calle tercera hacia la carrera quinta están el edificio de antigua aduana, casa del abuelo de Gabriel García Márquez y las esquinas de propiedad de familia Deluque. Los balcones azules y más arriba el famoso Palacio Encantado.
La estatua de Luis Antonio ‘Negro’ Roble Suárez, debió conservarse siempre en el Parque Padilla, mostrando dos personajes de alcurnia, elaborándole otra estatua para colocarla en la casa que fue de su propiedad en el corregimiento de Camarones, la cual debe quedar incorporados en los bienes antiguos del Distrito de Riohacha, adquiridos para la administración y cuidados.
La Gobernación compró la construcción donde funcionó el Teatro Aurora, para cederlo al Distrito de Riohacha, pero hasta hora, sigue en total abandono. También requiere de rescate el primer edificio de Riohacha ubicado en la plaza de Padilla fue de propiedad de Jorge Romero (Retra) de cuatro pisos. La catedral Nuestra Señora de los Remedios, sigue impecable, su mantenimiento y reparaciones a cargo de los párrocos de turnos, han tenido la colaboración y contribuciones económicas voluntaria ciudadanas.
El alcalde debe pedir el apoyo de financiación para adquirir los inmuebles al Ministerio de Cultura, que disponen de fondos presupuestales de la nación para atender y resolver gastos destinados en patrimonios históricos en el territorio nacional, de los cuales La Guajira, no ha hecho exigencias algunas y ahora a tocar puertas pidiendo ayuda por necesidades apremiantes que requieren de urgente solución y la administración distrital, no dispone de recursos económicos, para atender el problema urbanístico histórico.
Una vez restablecido las reconstrucciones con algunas modificaciones internas, de adecuación, pueden ser utilizados como restaurantes, establecimientos de artesanías, eventos y lugares recreativos sanos, entregándolo en arriendo, con la finalidad de obtener ingresos para las reparaciones y conservación en su estado natural. De los tres inmuebles en grave estado ruinosos, dos segundos pisos, son de maderas, la otra era de barro con adobe o enchape de cemento, en parte interior y exterior. Un municipio de Italia está utilizando el barro, en construcciones urbanas como novedades arquitectónicas. Las tres viviendas tendrán que levantarlas de nuevo, conservando su vieja estructura.
Me sumo a aquellas personas que lideran la iniciativa de rescatar y conservar inmuebles antiguos en deterioro.