Hablemos de vallenato. ¿De vallenato? Sí. Conozco el tema porque en medio de él nací y crecí. Mis papás tenían un billar. Así que a mí me arrullaron con vallenato y ranchera.
Tendría 6 años cuando me aprendí ‘Surgió Una Voz’, no digo que sea la primera, pero si de la que me acuerdo, claro que todos se aprendieron ‘Cristina Isabel’, ‘Tres Canciones’, ‘Ventana de Cristal’ y ‘Celos con Rabia’, pero yo me compadecía del pobre hombre que sufría debajo del arbolito, (para mí era de Puy florecido), que el papá de la muchacha había sembrado en el potrero.
Imaginaba al joven sentado en el suelo, recostado al palo, llorando, sin esperanza y la fe perdida, porque ella no lo quería aceptar. Luego la alegría de aquel momento… una mañana… sus labios se abrieron y de su boquita surgió una voz diciendo que ¡Sí! Oh, le dijo que ¡Sí! Era una novela. La primera que recuerdo haber leído, (o debo decir oído) firmada por: Luis Segundo Sarmiento. ¿Quién es? No sé. Solo dejó dos obras conocidas, interpretadas por Diomedes Díaz ‘Surgió Una Voz’ y ‘El Ciruelito’.
¿Qué pasó con este magnífico compositor? Eso ando averiguando, sin mucho éxito, peor aún porque ya murió. Pero ando en la pista, el hombre vivía en Villarrueda, una vereda cercana a Carrizal, tiene muchos familiares en La Junta y Curazao, sector donde parrandeaba con Néstor Vega (Q.E.P.D.), papá de mi amiga Yoleida, quien lo recuerda como un hombre alegre.
En la otra esquina, nacido en Patillal, tierra de poetas, encuentro a uno muy particular, no tan prolijo ni connotado como ‘Beto’ Daza, Fredy Molina, Octavio Daza o ‘Chiche’ Maestre, pero si el compositor de la mamá de las canciones vallenatas en toa’ la bolita ‘el mundo: ‘Las Cosas Mías’; Nicolás Esteban Maestre.
‘Las Cosas Mías’, una canción completa en letra, melodía, trazos, métrica, hasta las dos interpretaciones, la de Otto Serge y por supuesto la del ‘Jilguero’ fueron magistrales.
Al regresar del primer semestre de universidad, 8 años después de haber salido ‘Las Cosas Mías’, la descubrí, la amé y nunca más salió del primer lugar de mi decálogo personal. ‘Las Cosas Mías’ habla de lo que permanece para siempre: el amor. Este hombre unió a su pueblo, su mamá, a su novia y a su papá en la misma canción, dándole a cada uno lo que merece a través de un poema.