Un cura terminó con el cráneo fracturado tras recibir una golpiza de un hombre que lo sorprendió tocando indebidamente a su hijo. El caso se presentó en la ciudad de Oklahoma, y el sacerdote involucrado fue identificado por el Departamento de Policía como Michael Coghill.
No era la primera vez que Coghil hacía tocamientos indebidos a su víctima en un paradero de buses. Como a principios de esta semana ya había manoseado al menor, el niño le contó lo sucedido a su familia, y el papá decidió descubrir al cura.
El padre del niño decidió seguirlo hasta la estación de buses donde Coghill solía tocarlo. El adulto se quedó en el carro mientras su hijo esperaba por la aparición del sacerdote. En efecto Coghill apareció, se acercó al menor.
“Mientras miraba la parada del autobús escolar, nuestro sospechoso pasó corriendo junto a él, pasó corriendo por la parada del autobús donde esperaban los niños. Se dio la vuelta, regresó y se detuvo donde tocó al niño”, dijo Dillon Quirk, jefe de la Policía de Oklahoma.
El papá de la víctima grabó lo sucedido en video, y luego se bajó del carro, se acercó a Coghill y lo golpeó en repetidas ocasiones hasta ocasionar graves heridas.
Tras lo sucedido, el papá del niño entregó su evidencia a la Policía, y el sacerdote fue arrestado para que responda por el delito de ‘Actos lascivos contra menor de edad’.