La transformación energética de nuestro país lo que busca seguramente es generar nuevas políticas públicas y con ellas, una reforma institucional que le permita al gobierno Nacional fortalecer y modernizar el sector energético, de cara a los desafíos que plantea el futuro de las energías alternativas.
En esa transformación que estamos analizando y colocándola en el plano de La Guajira, debe existir un cambio de conciencia a las poblaciones indígenas vecina a los proyectos eólicos y solares, pero además, las empresas que vengan a invertir en nuestra región tienen que tener la responsabilidad de socializar con los alcaldes y las comunidades para que exista primariamente el compromiso de conocer las bondades de los proyectos, su responsabilidad social y el respeto por las autoridades.
Al no socializar el inicio de los proyectos con los alcaldes y las autoridades tradicionales de la zona de influencia, es donde estarían las fallas de quienes vienen con el ímpetu de una autorización del gobierno Nacional, pasándose por la faja a los mandatarios locales y a los dueños ancestrales de la zona. De no cumplir con ese procedimiento, es donde los alcaldes le prestan poca atención al momento de la resolución de un conflicto y quieren entonces esas empresas que el alcalde proceda a solucionarle el problema en que se han metido con la comunidad
Nos tenemos que preparar para el nuevo periodo económico que viene estableciendo el gobierno del presidente Gustavo Petro con el funcionamiento de nuevos parques eólicos y granjas solares, en donde sabemos que los grandes beneficiarios serán la industria regional y nacional. Es allí en donde nace un nuevo complemento económico que depende si dentro de las políticas gubernamentales está el hecho de entregar nuevas licencias para el funcionamiento de nuevos parques eólicos y granjas solares
No sabemos hasta dónde sea tan utópico que la puesta en servicio de los nuevos parques eólicos en la Alta Guajira permitirá fortalecer la industria regional en la compraventa de la energía mucho más económica y en la eventualidad que se instalen empresas en La Guajira. Tenemos derecho a exigir que el precio del Kv/h sea más económico.