Una de las deudas del gobernador encargado saliente de La Guajira, Weildler Guerra Curvelo, fue no atender como se merecía los sectores de la cultura y el deporte, generando malestar en quienes dedican su tiempo y esfuerzos en cultivar las artes.
El tema, que generó más de un análisis por quienes tienen claro lo necesario que es para la comunidad trabajar alrededor de las diversas manifestaciones culturales, debe propiciar en la nueva gobernadora encargada, Tania Buitrago, una atención especial para evitar que se presenten los mismos errores del gobierno que le antecedió.
La cultura y el deporte son pilares fundamentales para el desarrollo de la ciudadanía, razón suficiente para que los gobiernos entiendan la necesidad de apropiarle los recursos que sean necesarios para desarrollar cada una de esas actividades.
Corresponde en esta nueva oportunidad que los trabajadores de la cultura, alejados de todo tipo de malquerencias, se unan para que generen un diálogo cordial con la gobernadora encargada y analicen de manera descarnada la situación, para así encontrar puntos de acuerdo para definir algunas líneas de trabajo que permitan fortalecer el sector.
Solo unidos, bajo el respeto a la diferencia y valorando el trabajo de cada quien, se podrá lograr el interés de la administración departamental para encontrar una salida a la crisis económica que también está golpeando a quienes generan espacios de reflexión a través de las artes.
Los procesos culturales necesitan ser apoyados para que se puedan mantener en el tiempo, valorando los resultados que se han dado en cada una de las manifestaciones como la música, la literatura, el teatro, el baile y otras que enriquecen el espíritu.
Es importante que la gobernadora encargada atienda el sector y juntos puedan buscar solución a las dificultades que actualmente se enfrentan como la falta de recursos para poder avanzar en cada uno de los procesos que se abanderan.
La cultura es un renglón importante de la economía de La Guajira, alrededor de ella giran muchas iniciativas que generan empleo, pero lo más importante es la posibilidad para la ocupación del tiempo libre de los niños y jóvenes.
Ellos son el presente y el futuro del Departamento, por lo que necesitan no solo asistir a un aula de clases, sino trabajar sus habilidades representadas en diversas manifestaciones culturales, mostrando una cara diferente de La Guajira donde se le da especial valor al ser humano.