En el municipio de Sitionuevo, ubicado en la ribera del río Magdalena, se llevó a cabo una campaña benéfica impulsada y realizada por estudiantes de la Universidad Autónoma del Caribe, estudiantes de undécimo grado del Colegio Alemán y la Fundación Colombo Alemana.
El evento se realizó el pasado domingo 21 de noviembre, donde se estuvieron llevando a los habitantes de este sector, mercados de alimentos no perecederos, ropa, refrigerios y la realización de varias actividades lúdicas y recreativas.
La solidaridad es un valor humano que tiende a encontrar su auge cuando ya se respiran aires decembrinos. Un gran número de campañas benéficas se adelantan a lo largo del territorio nacional, las cuales tienen como objetivo beneficiar a las poblaciones más vulnerables.
En esta ocasión el lugar escogido fue el municipio de Sitionuevo, municipio del Magdalena, en donde previamente se había realizado un censo adelantado por miembros Scouts Marinos Cipacoa, quienes también participaron en la logística del evento, apoyando a los organizadores principales.
Poco a poco fueron llegando las familias del municipio. Padres y niños comenzaron a aglomerarse en la puerta del recinto, por lo cual fue necesaria la intervención de los voluntarios del evento.
El desespero con el que las personas acudían a la cita tenía una razón: “la situación está difícil”, así lo dijo uno de los beneficiados, Jairo Causado, quien se dedica al mototaxismo en aquella población.
Además, aseguró que la situación económica del pueblo en general es precaria y, en su caso, lo que gana a diario apenas le alcanza para alimentar a su familia, así que no queda dinero para comprar otros elementos esenciales para cualquier persona.
Por tal motivo, se manifestó muy agradecido por esta actividad, ya que, además de los alimentos, se donaron prendas de vestir, algo que se ha convertido casi que en un lujo para ellos.
Pero, sin duda, los protagonistas principales de la jornada fueron los pequeños sitionueveros. Los niños fueron el foco central de la campaña realizada. Todos los niños del municipio se volcaron en masa hacia la plaza, para participar de las actividades que los organizadores diseñaron para ellos, entre las cuales figuraron la realización de competencias de destreza físicas, la explotación de la creatividad a través de manualidades artísticas, la libre recreación en los inflables que se instalaron en el sitio y hasta un torneo relámpago de fútbol.
Todo esto acompañado de la entrega de refrigerios como frutas, jugos, mecatos; prendas de vestir y juguetes a más de 200 familias que previamente fueron censadas para llevar a cabo dicha actividad.
¿Quiénes realizaron esta labor?
Las más de 80 personas que conformaban el equipo de voluntarios, estaban subdivididos en tres equipos especiales. Uno de ellos fue el grupo llamado Solidarios, conformado por ocho estudiantes de Comunicación Social – Periodismo de la Universidad Autónoma del Caribe quienes se unieron a la actividad por motivos correspondientes a su formación como profesionales.
“Nuestro grupo recibe el nombre de Solidarios, como resultado de la tarea de adelantar una campaña ciberactivista, para el proyecto final de una de nuestras asignaturas. Entonces nosotros nos decidimos por diseñar una campaña benéfica y, desde el primer día que lo planteamos, cada uno de los integrantes realizó distintas estrategias para recolectar el mayor número de donaciones para las familias de Sitionuevo”, manifestó Delia Rincón, directora del proyecto y una de las líderes del grupo de estudiantes universitarios.
El otro pilar de este equipo estaba compuesto por decenas de estudiantes de undécimo grado del Colegio Alemán de Barranquilla, liderados por Mauricio Acosta, el coordinador del grupo CAS, integrado por los educandos de esta institución y cuyas siglas significan creatividad, aktivitäten (escrito en alemán) y service (escrito en inglés); como muestra de la cultura trilingüe del colegio. “Nuestros estudiantes de undécimo deben desarrollar actividades que se contemplan en el CAS y en esta ocasión estamos viendo cómo ellos realizan labores correspondientes a lo que es el “service”, lo cual hace referencia a que se debe prestar un servicio social a las comunidades, en el mayor de los casos, las más vulnerables”, dijo el coordinador.
De la mano del Colegio Alemán, trabajó la Fundación Colombo Alemana con la participación especial de dos de los miembros de la junta directiva, Carlos Lindemeyer y Rubén Arrieta. Lindemeyer es también el presidente de la junta directiva del Colegio Alemán e hizo énfasis en cómo la pandemia había afectado la realización de estas jornadas: “El Colegio anualmente acostumbraba a realizar dos campañas benéficas en zonas vulnerables, pero la pandemia había imposibilitado el adelanto de estas y esta es nuestra primera excursión desde que el Covid-19 llegó a nuestro país”.
Otros que también estuvieron presentes en la campaña benéfica en Sitionuevo fueron los miembros de un equipo de Guardacostas de la Reserva Naval de Barranquilla, coordinados por el gestor de acción integral, Luis David Toro; quienes prestaron el servicio de acompañamiento y seguridad.
Toro se mostró muy satisfecho por la labor prestada por su equipo, que con frecuencia brinda este tipo de servicio y constantemente están visitando zonas vulnerables para llevar estas ayudas.