Los habitantes de Bahía Rada, una pequeña localidad del municipio de Moñitos, Córdoba, tienen entre ellos a una gigantesca tortuga marina caná de casi 200 kilos de peso. El reptil en cuestión es una especie en peligro de extinción que quedó atrapada en las redes de pesca.
La fuerza de diez pescadores, voluntarios y una lancha fueron necesarias para llevar al pesado animal hasta la orilla.
Ciro Negrete, uno de los rescatistas de la tortuga, explicó que el animal presenta una lesión en una de sus aletas.
“A unos mil metros de la orilla estaban pescando y ella entró y se enredaron las aletas en las mallas de las mantas y los muchachos, cuando fueron a revisar, ya estaba enredada”, dijo el pescador.
“Al llegar a la orilla, entre todos la cargamos, la metimos en una enrramada y le echamos agua salada para que se oxigenara, pero está en buen estado y creemos que está cerca de dar a luz”, agregó.
Para auxiliar al animal, funcionarios de la Corporación Ambiental de los Valles del Sinú y San Jorge (CVS), se trasladaron hasta el lugar junto a funcionarios para atender a la tortuga y regresarla al mar.
Los voceros de la CVS explicaron que esta especie de tortuga, la Dermochelys coriacea, es la mayor entre este tipo de reptiles. Puede llegar a medir 2,3 metros y un peso de hasta 600 kilos.