Los habitantes del municipio de Barrancas, incluyendo su zona rural, no tienen un lugar donde recrearse, ya que el Parque Recreacional Agua Luna fue destruido y desvalijado en su totalidad.
El citado parque tuvo una inversión que superó los 10 mil millones de pesos contaba con áreas recreativas, piscinas, tobogán, carros chocones, trencito, carbonero, brinca – brinca y otros juegos para la recreación.
Sin embargo, actualmente las piscinas están convertidas en criaderos de insectos y zancudos.
El mismo fue destruido en la administración del elexalcalde Jorge Cerchiaro Figueroa. Lo grave de la situación es que en La Guajira no existe ningún órgano de control que busque a los responsables de este detrimento público.
Por lo tanto, la comunidad de Barrancas le solicita a la Procuraduría General y a la Fiscalía investigar y buscar responsables por este hecho que atenta contra la recreación y el medio ambiente de más de 35 mil personas.