Más de 5.200 muertos y 25 mil heridos dejan los terremotos que sacudieron Siria y Turquía

Al menos 5.261 personas han muerto y decenas de miles resultaron heridas después de que dos terremotos de magnitud 7,8 sacudieran Turquía y el norte de Siria este lunes. La carrera contra el tiempo es rescatar con vida a centenares de sobrevivientes que están bajo los escombros.

Cerca de 11 mil edificios colapsaron en ambos países y las agencias de ayuda están especialmente preocupadas por el noroeste de Siria, donde más de 4 millones de personas ya dependían de la asistencia humanitaria.

El sismo, uno de los más fuertes en la región en más de 100 años, se registró a 23 kilómetros (14,2 millas) al este de Nurdagi, en la provincia turca de Gaziantep, a una profundidad de 24,1 kilómetros (14,9 millas), dijo el Servicio Geológico de EE.UU.

El número de muertos en Siria supera los 1.712 después de que los Cascos Blancos, también conocidos como Defensa Civil, dijeran este martes que más de 900 personas han muerto en áreas controladas por la oposición. En las zonas controladas por el gobierno, el número de muertos es de 812.

Más de 25.000 personas han resultado heridas según cifras del gobierno turco y los socorristas luchan contra las bajas temperaturas que afectan este país.

China anunció este martes el envío de una ayuda de USD 5,9 millones, que incluirá equipos especializados en el socorro en entornos urbanos, equipos médicos y material de urgencia.

Cerca de 45 países ofrecieron ayuda internacional a Turquía, la cual debe empezar a llegar hoy mismo con los primeros equipos de socorristas de lugares como Francia o Catar.

El presidente de Estados Unido, Joe Biden, prometió a su homólogo turco Recep Tayyip Erdogan «toda la ayuda necesaria, sea la que sea». Dos destacamentos estadounidenses con 79 socorristas cada uno, se estaban desplazando al lugar.

El contingente francés pretende llegar hasta Kahramanmaras, en el epicentro del terremoto, una región de acceso difícil y sepultada bajo la nieve.

En cambio, el llamado lanzado por el gobierno de Siria recibió por ahora respuesta de Moscú, su aliado, que prometió equipos de socorro «en las próximas horas», además de 300 militares rusos que ya se encuentran en el lugar para ayudar en el rescate.

La ONU también reaccionó, pero insistió en que la ayuda debe llegar a toda la población siria, incluida la parte que no está bajo control de Damasco.

Aprovechando el caos provocado por las sacudidas, una veintena de combatientes presuntamente del grupo Estado Islámico (EI) escaparon de una prisión militar en Rajo, controlada por rebeldes proturcos.

El presidente turco decretó un luto nacional de siete días y el cierre de escuelas durante una semana.