Ante la imposibilidad de cumplir el fallo de un juez de solicitar pruebas PCR a viajeros internacionales que ingresen al país, el ministro de Salud y Protección Social, Fernando Ruiz Gómez, indicó que «lo que procederá será la radicación de la impugnación del fallo» y que continúe el proceso.
Explicó que el incidente de desacato fue por parte del abogado que instauró la tutela «desde el mismo día en el que se solicitaron las aclaraciones».
«Un desacato es una actitud manifiesta de mala voluntad, de negligencia, buscar entorpecer o a conciencia engañar a la justicia y esta no es nuestra situación. La nuestra es la imposibilidad desde el punto de vista sanitario y de defensa de la salud pública de este país de poder aplicar un fallo que nos genera una situación extrema frente a la política de salud pública», dijo.
El alto funcionario argumentó que como país «llevamos diez meses en condiciones fuertes para contener la pandemia. Una medida de cuarentena a 120 mil personas que viajan cada mes, implica efectos en salud mental y tranquilidad pública. Los colombianos tenemos un nivel de agotamiento en este sentido», agregó.
Indicó, además, que desde el punto de vista de la salud hay unos determinantes sociales como la pobreza y el desempleo «y eso también tiene efecto en la salud. La economía y la salud tienen que moverse armónicamente siempre guiados por consideraciones epidemiológicas y eso es lo que hemos hecho en el país»
Reiteró que la justicia tiene un componente muy importante, una acción en la protección de los derechos de las personas.
«Hemos sido respetuosos de las órdenes y acatado cientos de tutelas, respetando el orden institucional».
Más allá del fallo, manifestó, el tema que complica es la limitación de la capacidad de autoridad sanitaria para mantener una estrategia integral en un tema complicado como lo es una pandemia.
En comparación con otros países que solicitan la prueba, argumentó el jefe de la cartera de la Salud, es que «la situación epidemiológica de los países es diversa».
“Colombia ha tenido una extensión del contagio con una curva aplanada, mientras en Europa, por ejemplo, se dan picos y hay países que tienen afectaciones diferenciales muy grandes y las frontera son porosas».