El 1 de julio del presente año se celebró el cumpleaños No. 54 del departamento de La Guajira.
En Riohacha se realizó la presentación de varios grupos musicales y de danzas folclóricas; en esos eventos cada año se habla de los diferentes problemas que tiene el Departamento: la falta de agua, la desnutrición, el desempleo, vías en mal estado, problemas de salud y educación, inseguridad y hambre, entre otros.
Pienso que lo importante no solo es hablar de los problemas, como decía mi mamá la vieja ‘Yiya’ en San Juan “a grandes males, grandes remedios”, eso es lo que tiene que buscar el gobernador (e) Wilbert Hernández Sierra, los 15 alcaldes, diputados y concejales, con el apoyo en Bogotá de los representantes María Cristina Soto y Alfredo Deluque, jalonar recursos a través de proyectos para mejorar la malla vial en todo el Departamento; poner en funcionamiento los distritos de riego de San Juan del Cesar que benefician a 229 familias y el del Ranchería que beneficia a 800 familias de Distracción, Fonseca y Barrancas; también hay que poner en funcionamiento la represa para dotar de agua potable a municipios como San Juan del Cesar, Distracción, Fonseca, Barrancas, Hatonuevo, Albania, Maicao, Uribia y Manaure, con la puesta en marcha de este proyecto se van a irrigar más de 18.000 hectáreas, lo cual reactivará la economía de la región, logrando la diversificación de cultivos como el arroz, paprika, melón, patilla, yuca, maíz, frutales, cítricos, palma aceitera, ají, tomate, ahuyama, papaya, cacao, berenjena, zanahoria y pimentón, organizando y mejorando las actividades y producción agrícolas y pecuarias de La Guajira.
Este proyecto genera empleo y si hay empleo hay recursos nuevos que van a servir para que sus habitantes puedan satisfacer sus necesidades básicas insatisfechas y tengan un mejor nivel de vida. También se soluciona el problema de la sed y de sequía que están padeciendo miles de guajiros a lo ancho y largo de la península, además de progreso y desarrollo ya que se van a crear nuevas empresas: agrícolas, pecuarias, comerciales, industriales, constructoras, cooperativas de transporte y comerciales.
La Guajira tiene el recurso humano para desarrollar estos proyectos, es lo que deben tener pendientes nuestros gobernantes y darle enganche a toda esa masa de profesionales, tecnólogos, técnicos y obreros que están cruzando calle en los 15 municipios porque no hay empleo.
Desde luego que con la puesta en marcha de estos proyecto se van a cambiar las estadísticas en el Departamento, porque esto bajaría los índices de pobreza, analfabetismo, desempleo, desnutrición y necesidades básicas insatisfechas; dejaríamos de ser un departamento que depende en materia alimentaria del interior del país y la región Caribe, para convertirnos en autosuficientes ya que podemos producir todos los alimentos que consumimos en nuestros hogares y el excedente que queda puede ser vendido a otras regiones del país y hasta países vecinos. Pasaríamos de ser importadores a exportadores y esto generaría divisas para invertir en programas de salud, educación, vías e infraestructura; la ejecución de este proyecto también cambiaría la frase de que La Guajira es un departamento rico viviendo en la pobreza.