Por Obed Alfonso Fragozo Manjarrez
Falta de educación financiera: el desconocimiento en formación financiera, que se puede fortalecer a través de la educación con bases sólidas y orientación puntual sobre el desenvolvimiento de los jóvenes estudiantes cuando enfrenten sus propias necesidades y tomen sus propias decisiones financieras.
Escaso hábito de lectura: fomentar desde las instituciones y desde el seno familiar el hábito de lectura de los jóvenes estudiantes para fortalecer sus habilidades, al tiempo que se promueve la apertura hacia nuevos enfoques profesionales (más allá de los tradicionales: medicina, ingeniería, derecho, etc.).
Bajo impulso de talentos: se observa que las instituciones educativas pueden estar desperdiciando esa vena innata (la poesía cantada y otras formas del arte), ese ADN que tradicionalmente ofrece en San Juan y que debería explotarse de la mejor manera para que los jóvenes logren estimular más sus procesos creativos, como alternativas para el desarrollo profesional dentro de la expansión de la economía naranja. Así mismo, las escasas estrategias que permitan descubrir, potenciar y fortalecer los talentos (deporte, arte, entre otros), y no dejarlos perder, para lo cual se hace necesario incrementar la intensidad horaria de las asignaturas humanísticas.
La deficiencia en contenidos específicos en algunas asignaturas, que se traducen en dificultades del estudiante al momento de iniciar su carrera profesional, lo que exige buscar un mejoramiento en la calidad de los aprendizajes, unido a la formación docente en las bases de la educación.
Deficiente manejo del idioma inglés: existe la necesidad de fortalecer las bases del idioma inglés dentro de las instituciones educativas (garantizar ese enfoque), tratando al tiempo, de despertar la conciencia de los padres sobre el tema desde su rol como orientadores y su vinculación con los Proyectos Educativos Institucionales (PEI), entendiendo que las exigencias del mundo moderno indican la necesidad del bilingüismo para ser más competitivo, lo que implica migrar poco a poco las materias hacia ese segundo idioma.
Bajo proyección social e interinstitucional: se debe propender por mejorar las proyecciones de las instituciones y entre las instituciones (enlaces, redes, alianzas no solo locales, sino nacionales e internacionales), que promuevan una expansión de los contenidos y el desarrollo de competencias en los estudiantes a partir de las fortalezas que cada institución aliada tenga, aprovechando las ventajas que ofrecen las tecnologías de la información y la comunicación. La invitación aquí es acudir a la innovación para generar mayor valor al proceso de formación y que haga parte de la misión y visión de las instituciones.
El nivel de profesionalización docente, y especialmente para fortalecer la educación básica, acompañada de capacidades para identificar, evaluar y potenciar talentos y competencias de los estudiantes.
Los diferentes sesgos culturales, políticos y religiosos: preparar al estudiante para entender y afrontar esos choques culturales y formas de ver el mundo, a los cuales se enfrentan cuando interactúan con otros en otras regiones.
No existe prioridad dentro de las instituciones educativas por mejorar e implementar mecanismos de orientación profesional que ayuden al estudiante a elegir un perfil adecuado, que tenga en cuenta entre otros aspectos, las realidades socioeconómicas actuales y futuras de La Guajira (minera, agropecuaria, turística, etc.), para que se proyecte la formación alrededor de estos cambios y ser innovadoras.
Escaso fortalecimiento de la identidad y la autoestima de los jóvenes para enfrentar nuevos escenarios, entendiendo que las instituciones y sus proyectos educativos institucionales deben recoger las necesidades institucionales y sociales que logren un mejor desarrollo de la región.
Incurrir en costos adicionales para alcanzar mejor nivel de formación: es importante considerar que, cuando no se tienen programas fuertes y estructurados dentro del proceso de formación, el estudiante debe invertir tiempo y su familia recursos extra, para fortalecer las diferentes falencias, ocasionando un impacto negativo frente a su evolución normal. Ejemplo: el aprendizaje del inglés.