Es importante mencionar que se ha convertido en un tema de estudio, la historia y vida de los lugares por donde paso Gabriel García Márquez ‘Gabo’, es claro que el contenido de cada una de sus novelas y cuentos son una autobiografía, escritos con el encanto de una imaginación sin límites y una narrativa llena de elementos literarios, que hacen que el lector viva lo que lee como si fuera actor principal, atrapándolo en sus páginas hasta terminar el contenido del libro que está disfrutando.
En el Club ABC de Barranquilla el 11 de abril, con la participación del docente filósofo e historiador Isidro Álvarez Jaraba, de periodistas, docentes, estudiantes y público variado se dio el Conversatorio García Márquez en la Mojana, La otra orilla de Macondo, la presencia de Sucre – Sucre en la obra de ‘GABO’, en él se compartieron los estudios de Isidro Álvarez, en los que se demuestra una presencia e influencia clara de las historias reales de la región Caribe colombiana, en las obras de ‘Gabo’, se hizo énfasis en los elementos históricos aportados por la Mojana – Sucre – Sucre, pues la juventud de García Márquez se desarrolló allí, lugar donde conoce a la que fue su única esposa Mercedes Barcha, de la Mojana toma el entorno, la realidad de esta región, combina las historias y lugares reales de otras regiones como La Guajira, sus abuelos y familia materna llegarón desde La Guajira a Aracataca, Magdalena, donde pasó su niñez, se las contaron, el entorno familiar incentiva su creatividad e imaginación, luego recibe las experiencia de vida como adulto en Riohacha, Barranquilla, Cartagena, Valledupar y alrededores de estas ciudades capitales.
Con todos estos elementos ‘Gabo’ construyó una obra literaria, sus lectores las pueden recrear de una manera fabulosa, al visitar cada uno de los sitios del Caribe colombiano que están en su obra, pues existen, hoy son testigos e historia viva del paso de ‘Gabo’, las incluyó en su narrativa, de una manera artística y con detalle singular.
La comunicación, sus medios y desarrollo tecnológico, fueron para ‘Gabo’ un entorno natural, hijo de un telegrafista, los abuelos y tías se podrían asimilar a unos cuenteros, que le narraban las historias reales e imaginarias de su Guajira, las vivencias en la Mojana Colombiana y los tránsitos por Barranquilla, Bogotá, Zipaquirá en los que demuestra su preferencia por escribir, la literatura y la comunicación, que luego en su vida adulta se convierte en su profesión como periodista y escritor.
El desarrollo vertiginoso de los medios de comunicación le aportaron mucho a las obras de ‘Gabo’, pero también fueron de alguna manera obstáculo y dificultades, como lo narra García Márquez en varias de sus entrevistas, pues el primer original de su obra cumbre, no la pudo enviar completa para revisión a Argentina, por los costos y de alguna manera restricciones. Sucede en su obra ‘El Coronel No Tiene Quien le Escriba’, que tiene el tinte peculiar de ‘Gabo’ entre lo real y lo mágico, en ella hay una comunicación que nunca llega… o que nunca se envía… solo el escritor y su imaginación saben lo que en realidad sucedió.
Somos muchos del Caribe colombiano víctimas como el “Coronel” de la obra de García Márquez, de los limitantes de los sistemas de comunicación y envíos de giros – paquetes – encomiendas – o documentos, pues ese medio de comunicación aún existe, desde tiempos inmemoriales de la humanidad, nunca podrá ser reemplazado por computadores, redes sociales o sistemas de comunicación, cuando debemos hacer un envío, se nos obliga a recrear a los ciudadanos del común las escenas de largas colas, servicios de mensajería de altos costos, monopolístico y sin control, momentos que le tocó asumir a ‘Gabo’ en vida, que fueron su inspiración para escribirlos como novelas, cuentos o historias, que escritas por nuestro premio nobel parecen imaginarias, pero son real en nuestros país y región caribeña de las “Mariposas Amarillas – Macondo”. “Vivir para Contarlo”.