La virtud es el patrimonio moral del ser humano, la potestad de obrar bien con las personas, ella es de buen proceder en la vida y de buenas acciones; también son los valores positivos en la personalidad del hombre o la mujer, dice el libro de Urbanidad de Carreño que “la virtud es la fuerza interior que permite a las personas tomar decisiones correctas y actitudes positivas”. Las virtudes defienden a las personas en la vida de los vicios espirituales y corporales, cada vez que muere un vicio nace una virtud y si la virtud es mal aplicada se convierte en vicio.
Clases de virtudes: teologales y cardinales. Las teologales son fe, esperanza y caridad, virtudes religiosas cuyo objetivo es Dios, y virtudes cardinales son el principio y fundamento de las demás virtudes, estas son: la prudencia, la justicia, la fortaleza y la templanza; la prudencia es la virtud de la razón, nos da luz para actuar correctamente, nos hace conocer los medios conducentes para obrar bien, nos previene cualquier imprudencia, ella es de cuidado y de no apresurarse para hacer las cosas. La justicia es la virtud moral por excelencia y en preceptos del derecho es darle a cada quien lo que le pertenece; la fortaleza es la que supera las debilidades del ser humano, las que enfrenta las adversidades y la templanza es la que resiste las tentaciones y no darse por vencida en los recorridos de la vida. Si quieres tener éxito y salud en la vida, aplica estas virtudes otras virtudes: El amor encaja en todas las virtudes, la humildad es la sencillez de la persona, su nobleza; la honestidad es la virtud que actúa conforme a la conciencia; la humildad y la honestidad es la mejor arma para conservar el prestigio personal; la tolerancia es la virtud del temperamento humano, del perdón; la diligencia es la virtud del dinamismo va en contra de la pereza y de la negligencia.
La virtud es de la ética, de la moral y de las buenas costumbres, la moral enseña y la ética aconseja. La virtud desvía el camino del mal y coge por el camino del bien. Don Quijote de la Mancha decía que la virtud no se hereda, se enquista para significar que no podemos apartarnos de ella, la virtud reconoce el don de los demás. Relación de la virtud y la ley (la moral y el derecho) la virtud es de la moral, la ley es fuente del derecho; las personas se hacen buenas por las virtudes, no por las leyes, a veces la ley no corrige a las personas, las personas obedecen la ley por temor al castigo.
La virtud y la cultura: dice un proverbio “el hombre vale por su virtud, es apreciado por su talento y cultura”. Hay que cultivar las virtudes; ser virtuoso en esta época es difícil por sus diferencias culturales y la corrupción moral.