Petro, el coco

De niño en el barrio Arriba, el coco para asustarnos era la llorona. Nos decían que si nos cogía la noche fuera de casa está alma errante nos llevaría a los mangles donde desapareceriamos, te va a llevar la llorona, nos advertían. 

En el entorno político colombiano se puede decir que el coco es Petro porque si es elegido presidente nos llevará el putas, nos convertiremos en la nueva Venezuela porque él, al igual que Maduro, en el fondo son socialistas irredimibles que arrastraría la economía a la ruina.

En este momento los bandos políticos se organizan y se avizoran dos grupos contrapuestas: por un lado la oligarquía esencialmente andina constituida en los grandes partidos políticos que han detentado el poder en alianza estratégica con el Señor Uribe, tal como se vio reflejado en las elecciones presidenciales pasadas, juntos manejan a su antojo las tres ramas del poder público y los órganos de control, apoyados por los industriales, grandes terratenientes, banqueros, los dueños de los medios de comunicación más importantes, comerciantes y por un sector mayoritario de las fuerzas armadas que aun- que no pueden, en teoría, intervenir en política tras bastidores son un factor de poder y como tal definen muchas cosas para bien o para mal. 

En el otro bando encontramos pequeños partidos políticos alternativos tildados como de centro y centro izquierda, como el Polo, los verdes y, más definido a la izquierda tenemos a la Colombia humana de Petro. 

Surge, de acuerdo a lo dicho, dos grandes interrogantes: el primero ¿cómo hacer para que un sujeto que pertenece a la segunda vertiente pueda llegar al poder? y la segunda ¿Será que los primeros cederán el poder sin dar una dura pelea? Me imagino que los primeros están dichosos que el Señor Petro sea nuevamente su contrincante en las elecciones presidenciales que se avecinan porque él encarna lo postura más radical en lo que respecta al manejo del Estado, es decir, Petro representa el cambio extremo y eso lo saben sus contrincantes que, ni cortos ni perezosos, atacan sus posturas progresistas, algunas con marcado tinte populistas, y de hecho en una sociedad mayoritariamente conservadora y comprobadamente ignorante como la nuestra es una tarea relativamente fácil, es más, las últimas encuestas donde aparece Petro en la cima me lucen abiertamente manipuladas por sus enemigos que desde ya preparan su estrategia de desinformación para evitar que este

Petro asusta con sus propuestas a la gran oligarquía colombiana, de eso no hay dudas, porque les anuncia de antemano que los sacará del poder el cual usufructúan hace casi doscientos años, entonces, es obvio que quienes detentan el manejo del estado pondrán todo de su parte para evitarlo a tal punto de buscar y preparar un candidato que aparente ser de centro o de centro izquierda pero que no amenace sus privilegios, un tipo como Sergio Fajardo o alguien que se le parezca. De acuerdo a lo dicho saque sus propias conclusiones