“Las mayores dificultades del hombre empiezan cuando puede hacer lo que quiere”. Thomas Henry Huxley.
Han pasado ocho meses y aún estoy sentada en el mismo lugar donde inicié a vivir una forma de vida distinta a la que llevaba hace un año atrás; viajes, restaurantes, escuela, trabajo, tertulias, estudios, visitas, amistades, paseos, reuniones, fiestas, eso se detuvo, se redujo a las cuatro paredes de mi casa, se cohesionó para todos en casa.
No sé qué será, pero de alguna manera el internet ha sido una escapatoria para nosotros, nos permite escapar de esta triste realidad; nos distraemos y vemos en las noticias los anuncios de la partida de una amigo, un pariente muy cercano, nos asalta el miedo, la ansiedad, tratamos de olvidar, que tal vez nos puede ocurrir, pero realmente seguimos evadiendo ese pensamiento y buscamos distraer la mente, estamos juntos, pero seguimos solos, seguimos metidos en el vicio de la nada, donde se tratar de buscar calmar la ansiedad en la planeación de nuevas estrategias.
Es mentira decir que hemos aprendido, porque realmente sabemos que añoramos y pedimos a gritos nuestra vida pasada, nos desespera el encierro, somos seres egoístas y no han habido cambios ni los habrá, así esto nos acabe a todos.
“Un ser que se acostumbra a todo; tal parece la mejor definición que puedo hacer del hombre”, Fiódor Mijáilovich Dostoyevsk
Tal vez hay posibilidad de volver a lo mismo, o tal vez salga peor, a tratar de conseguir a costa de lo que sea, tres veces o más de lo que perdió, pero igual seguiremos contando la historia triste para unos y para otros no tan triste, pero la vida seguirá y nos permitirá salir de un virus creado por el mismo hombre para controlar el mundo, donde pueda comprobar la manera que puede manejar todo y a todos. Qué miedo, pero no hay peor virus de una persona, que él mismo.
“Los humanos no pueden soportar mucha realidad”, Thomas Stearns Eliot
Por tanto, querido humano, sigamos viviendo lo que somos, lo que hemos construido y que ha permitido destruir valores, contexto y nuestra esencia.
“Los azotes físicos y las calamidades de la naturaleza humana hicieron necesaria la sociedad. La sociedad se agregó a los desastres de la naturaleza. Los inconvenientes de la sociedad hicieron necesario al Gobierno, y el Gobierno se agregó a los desastres de la sociedad. Esta es la historia de la naturaleza humana”, Nicolas Chamfort.
De alguna manera somos la respuesta a nuestras preguntas.