Por tercera noche consecutiva, el presidente Iván Duque se dirigió a los colombianos mediante una alocución desde la Casa de Nariño, pero esta vez para anunciar las medidas que tomará su gobierno para afrontar la creciente oleada de protestas en su contra.
El mandatario anunció que a partir de la próxima semana dará inicio, “inicio a una Conversación Nacional, que fortalezca la agenda vigente de política social; trabajando así, de manera unida, en una visión de mediano y largo plazo, que nos permita cerrar las brechas sociales, nos permita luchar contra la corrupción con más efectividad”.
Durante la misma cadena nacional de radio y televisión, Duque confirmó que fue él quien solicitó a las autoridades de Bogotá decretar un toque de queda en esa ciudad para controlar los disturbios y saqueos que se vivieron en la capital durante la mayor parte del viernes.
Igualmente el presidente rechazó las expresiones de violencia desatadas durante las marchas y los cacerolazos y criticó a dirigentes políticos que aprovechan la coyuntura para sacar provecho personal.
“Una cosa es la expresión pacífica a través de la protesta, y otra bien distinta es aprovechar la protesta para sembrar el caos. Una cosa es que Colombia marche por un mejor país, y otra es que politiqueros quieran utilizar estas expresiones para su beneficio personal”, concluyó Duque.