Este jueves el Senado aprobó en último debate el proyecto de ley que convierte al Internet en un servicio público esencial, lo que significa que desde ahora se le considera tan importante como el acueducto o la energía eléctrica.
De acuerdo al representante liberal y autor de la iniciativa, Rodrigo Rojas, la idea es que los colombianos puedan acceder a una conexión a Internet con precios accequibles y competitivos sin importan su condición socioeconómica o su lugar de residencia.
Para Rojas, la aprobación de la ley es un estímulo para que se despliegue más infraestructura para ampliar la conectividad. Además la norma incluye beneficios para los ciudadanos que no puedan pagar su conexión durante algún momento como navegar en hasta 30 sitios web y enviar hasta 200 mensajes de texto durante estados de excepción y emergencias sanitarias.
La nueva ley también flexibiliza los requisitos para que los operadores de telecomunicaciones obtengan licencias para ampliar su infraestructura y así llegar a más personas con sus servicios.
Actualmente, solo 7,6 millones de hogares colombianos cuentan con una conexión a Internet.