El legado musical de ‘Nando’ Marín continúa: su hijo Juan Pablo se convirtió en Rey de la Canción Inédita

Juan Pablo Marín se coronó como el Rey de la Canción Inédita en el 56° Festival de la Leyenda Vallenata en homenaje a Luis Enrique Martínez, ´El Pollo Vallenato´. Juan Pablo Marín es nacido en San Juan del Cesar, ingeniero civil de profesión y hasta hace 10 años hacia parte del Ejercito, retirándose de las filas militares en el grado de teniente.

El ingeniero civil de 41 años y oriundo de San Juan del Cesar, La Guajira recibió la corona gracias a su canción en aire de paseo titulada ‘Si nace una rosa’, la cual fue compuesta en medio de la pandemia.

La inspiración para la canción nació de un sueño que tuvo con su padre el también compositor Hernando Marín, quien le dijo “No te desesperes, tu momento va a llegar y esa rosa tiene que florecer”.

Emocionado al recibir el veredicto, Marín Álvarez manifestó: “A los hombres los edifican sus sueños y hoy lo veo materializados”.

En la tarima “Colacho Mendoza del Parque Consuelo Araújo Noguera, ganó el segundo lugar Julio Romo Mendoza con el paseo ‘Soy Campesino’, y Ruth María Ferias Fonseca, el tercer puesto, con el paseo ‘Ella’.

Cabe recordar que, Hernando Marín (su papá) se coronó rey de la canción inédita en 1992 con ‘Valledupar del alma’ posteriormente grabada por Felipe Paternina y Amaury Paternina, mientras que su hermano Deimer Marín en 1999 ocupó un lugar de privilegio con la canción ‘Maestro de maestros’, grabada por él mismo.

El jurado calificador para la final de acordeón profesional y Canción inédita estuvo conformado por las siguientes personas: Pablo López, cajero de mucha tradición festivalera y líder de una dinastía que más corona ha logrado en el marco del Festival vallenato; Julián Ricardo Mojica Galvis, Rey del Festival vallenato 2018; José Carreño, folclorista y expresidente del Festival Cuna de acordeones de Villanueva; Carlos Mario Zuluaga, presidente del Club Deportivo La Equidad y David Racero, presidente de la Cámara de Representantes

Este logro de Juan Pablo Marín es un regalo del cielo de parte de su padre, y es un gran triunfo no solo para él, sino también para la música vallenata y para su tierra natal, La Guajira.